LA ESCUELA CONSCIENTE

MODELO PEDAGÓGICO

LA ESCUELA CONSCIENTE

El ser humano tiene, al menos, cuatro dimensiones que le conforman, a saber: física, intelectual, socioafectiva y espiritual. Para fortalecer nuestras dimensiones humanas, hemos dispuesto un conjunto de actividades específicas que favorecen diez áreas de desarrollo. Por simplificación, hemos de categorizarlas de una manera estructurada, pero en realidad, cada componente de este modelo favorece diferentes áreas de desarrollo e impacta de una u otra manera a las cuatro dimensiones.

Cada dimensión está conformada por áreas de desarrollo, y cada una de éstas se promueve a través de un conjunto de componentes que determinan los cursos que se imparten en las clases programadas para cada periodo. Estas clases se ejecutan a través de actividades que tienen como fin el desarrollo del producto, una evaluación del mismo y finalmente una retroalimentación del proceso.

El siguiente cuadro ilustra el modelo descrito en el párrafo anterior:
El siguiente cuadro ilustra el modelo general, mismo que se desglosará a continuación:
DIMENSIÓN FÍSICA

El cuerpo es el vehículo en el que viajamos ¿Qué tanto lo cuidamos? En este apartado encontramos las actividades que proponemos para establecer rutinas saludables en relación al ejercicio, la coordinación, la nutrición y el tiempo de descanso, entre otros. Todos aquellos aspectos que son fundamentales para gozar de una muy buena salud, para verse y sentirse muy bien.

Esta serie de habilidades está compuesta por un grupo de componentes que permite, por una parte, el dominio del cuerpo en relación a su buen manejo, y por otra, la sensación de contar con buena salud y sentirse atractivxs. Además, las rutinas y los aprendizajes que se plantean en esta área de desarrollo favorecen con creces las demás dimensiones. Están divididas en tres componentes: actividad física, cuidado personal e integración sensoriomotriz.

Actividad física

La actividad física es fundamental para el desarrollo corporal, pues fortalece el sistema cardiovascular, disminuye la presión sanguínea, mejora la circulación, previene el cáncer de colon, de mama y de próstata, reduce el estrés, la ansiedad, fortalece los huesos y los músculos, así como al sistema inmunológico aumentando las defensas para el organismo; mantiene un nivel adecuado de azúcar en la sangre, disminuyendo el riesgo de contraer diabetes tipo 2; ayuda a mantener un peso corporal acorde a la edad y a la estatura; mejora la concentración y las capacidades intelectuales; mejora la calidad y los tiempos de sueño, lo cual a su vez favorece la productividad; y libera endorfinas que producen buen ánimo.

Las habilidades que se desarrollan a través de la actividad Física son: tono, fuerza, volumen, flexibilidad y destreza (técnica).
Las actividades que se pueden desarrollar en este componente son: Caminar, Trotar, Correr, Estirar, Abdominales, Flexiones, Yoga, Pilates, Crossfit, Tenis, Baloncesto, Fútbol, Voleybol, Ping Pong, Patinaje, Ciclismo, Parkour, Escalar, Natación, Skate, Pole dance, Artes Marciales Mixtas, Saltar lazo, Gimnasia, etc.

Estas actividades deben respetar el ciclo: calentamiento, entrenamiento y estiramiento.

Este componente propone una cultura del cuidado del cuerpo mediante la adquisición de hábitos y rutinas saludables, así como la toma de consciencia de todas aquellas actividades que pueden deteriorar nuestro organismo.

Nutrición

Una buena nutrición es indispensable para lograr una vida saludable. Cada persona cuenta con un organismo que tiene unas necesidades y características propias. Aprender a leer el cuerpo y sus necesidades alimenticias es fundamental para llevar una vida sana: se trata de encontrar las porciones adecuadas de los diferentes grupos alimenticios, mantener una rutina de hidratación permanente y aprender a moderar aquellos alimentos que puedan afectar el organismo, como los alimentos saturados y ultra procesados.

Respiración

Además de las funciones propias de la respiración, aplicar técnicas de respiración tiene un enorme poder sobre nuestra vida emocional: nos permite encontrar la calma en momentos de exaltación, encontrar valor y energía cuando se requiere, e incluso enfrentar los problemas cotidianos desde una nueva perspectiva. La buena respiración facilita el alcanzar la tranquilidad y la felicidad.

Descanso

La reparación de la actividad diaria es fundamental para gozar de buena salud. Durante el sueño el organismo genera una serie de procesos básicos para el buen mantenimiento de todos los procesos que se llevan a cabo durante el día. Así mismo, hacer pausas durante la jornada favorece la concentración y el buen humor.

Cultura corporal

En este componente también se realizan talleres y charlas en torno a los vicios y las adicciones, para prevenir el consumo de sustancias adictivas y destructivas y promover una vida saludable. A la vez, crear el hábito de asistir al médico y al odontólogo para prevenir enfermedades y problemas de salud.

El objetivo de este componente es integrar las diferentes funciones perceptuales para desarrollar una óptima relación con el tiempo y el espacio. Si estas habilidades no se encuentran fortalecidas la información se percibirá de manera confusa, dificultando cualquier proceso de aprendizaje. El desarrollo de estas habilidades también tiene un gran impacto en las actividades que implican movimiento (como las deportivas), mejorando la coordinación y la posición corporal en diferentes estados.

Dos sentidos que se trabajan a través de la batería de ejercicios de este programa son la propiocepción y el sistema vestibular, favoreciendo con ello el balance, la línea media, la orientación en el espacio y la coordinación visomotriz.

DIMENSIÓN INTELECTUAL
Aparentemente, somos la única especie en el planeta que tiene la facultad de transformar su entorno a través de una poderosa combinación de funciones que realiza nuestra mente: la razón, la imaginación, la consciencia, el aprendizaje a través de la imitación o de la experiencia, la intuición, la capacidad para resolver problemas complejos, para crear e interpretar una gran variedad de símbolos, de comunicarnos a través de un lenguaje sumamente articulado, oral, gestual y escrito, y también, porque no, a través del instinto. ¿Cómo nos organizamos para fomentar el desarrollo de esta dimensión?

Una de las principales funciones de la mente es la de generar pensamientos. Éstos se forman a partir de las experiencias que vivimos y cómo se van acomodando, según una percepción profundamente subjetiva, a partir de nuestra comprensión del mundo, nuestros recuerdos, emociones y expectativas. Nuestras funciones cognitivas se desarrollan de manera integrada, pero podemos trabajar específicamente sobre las habilidades visuales, sobre la comprensión de objetos simbólicos, la capacidad de clasificar o de crear ideas, entre muchas otras funciones mentales.

Percepción

Toda la información que ingresa a nuestro cerebro es capturada a través de los sentidos. Éstos se pueden fortalecer y desarrollar, tal como lo hace un chef con su sentido del gusto. A través de terapias y ejercicios de estimulación, podemos trabajar en función de nuestra visión, audición, tacto, olfato, gusto e intuición.

Atención y concentración

Este componente intelectual resulta fundamental tanto en ambientes de aprendizaje como en la vida laboral. Implica fijar la atención en el objeto para observar y describir la realidad de la manera más objetiva posible. Tantas veces escuchamos que se diagnostica a nuestrxs niñxs con déficit de atención, y la solución que se plantea no es la estimulación cerebral, sino el uso de drogas que tienen efectos secundarios adversos.

Desarrollo intelectual

Cuando estamos expuestos a información, el cerebro opera sobre ella en dos procesos: los de entrada, como los son la comprensión, la memoria y la evaluación de la información; y los de salida o de producción, como son el pensamiento crítico, la solución de problemas y la creatividad. Estos procesos mentales también se pueden fortalecer y potenciar, a través del desarrollo de los métodos de razonamiento: análisis, síntesis, deducción, inducción, pensamiento lógico y analógico. A su vez, la memoria puede ser visual o auditiva, de corto, mediano o largo plazo y está estrechamente relacionada con la capacidad de concentración. Dos capacidades intelectuales muy requeridas en el mundo laboral contemporáneo, que no se fortalecen mucho durante la etapa escolar, son el pensamiento crítico y el divergente. Algunas actividades que favorecen decididamente este componente son la lectura, los debates y el ajedrez.

Metacognición

Los seres humanos tenemos la capacidad de evaluar los procesos mentales que se activaron durante un ejercicio intelectual. La metacognición implica el reconocimiento y la toma de consciencia de las dificultades y aptitudes de las cuales disponemos, lo cual nos permite adquirir experiencia y avanzar en nuestro proceso de aprendizaje. El conocimiento de los tipos de inteligencia con los que operamos con mayor facilidad nos puede dar una enorme ventaja para desempeñarnos con propiedad en diferentes escenarios.

Las habilidades académicas van mucho más allá de comprender los conocimientos que aprendemos en la escuela. De hecho, son más profundos y utilizamos con más frecuencia los aprendizajes que creamos bajo nuestra propia experiencia, acorde a nuestros intereses. La manera como nos acercamos al conocimiento depende también de aquello que sabemos previamente, de nuestra motivación, de nuestra disposición hacia el aprendizaje en un momento determinado y de otros factores, sobre los cuales reflexionamos en este apartado.

 

Hábitos de estudio

Los hábitos son rutinas positivas, que, al ejercitarse, se convierten en costumbres. Las buenas costumbres son vistas como virtudes y éstas a su vez se transforman en principios, que son aquellos valores que son innegociables para nosotros y que guían nuestras vidas. Los hábitos de estudio son aquellas rutinas que nos ayudan a aprender conocimientos, tales como el manejo del tiempo, el establecimiento de prioridades y el nivel de excelencia que le imprimimos a nuestro trabajo.

Técnicas de estudio

Así como un deportista de cualquier disciplina mejora su técnica a partir del entrenamiento, así mismo un buen estudiante puede mejorar su velocidad y comprensión de lectura, su cálculo mental, desarrollar una super memoria o emplear técnicas en el aprendizaje de idiomas.

Aprendizajes académicos

Éstos nos presentan el acervo de conocimientos que ha desarrollado la humanidad a lo largo de su historia. Están organizados de la siguiente manera:

1. Pensamiento y lenguaje:
Estudio del uso del lenguaje como medio para estructurar y comunicar nuestros pensamientos.

2. Aptitud matemática:
Aprehensión de los conceptos de la matemática en diferentes usos y aplicaciones.

3. Exploración científica: 
Recorrido por los campos de las ciencias naturales que procuran encontrar un orden natural a las cosas.

4. Mundo y sociedad.
Identificar diferentes fenómenos sociales desde una aproximación histórica, geopolítica y económica, desentrañando los intereses que motivan las diversas causas sociales.

Metodologías de la investigación

Existen diferentes formas de aproximarse al conocimiento. La investigación es una de las más poderosas, pues nos permite comprender un fenómeno de la realidad a profundidad. Dependiendo del tema y de la intención con la que se realiza la investigación, se puede emplear el método cuantitativo, el cualitativo, el método mixto o el de investigación – acción.

Idiomas

Una propuesta educativa innovadora debe proveer a sus alumnxs las herramientas que le permitan comunicarse con personas de todo el mundo. En ese sentido, el aprendizaje del idioma inglés resulta crucial, pero, gracias a la globalización, el interés por otras lenguas como el alemán, el portugués, el francés, el italiano y el japonés entre otros debe ser también atendido.

Una de las principales funciones de la mente es la acción, la creación, la solución de problemas, lo cual requiere el desarrollo de un pensamiento crítico, una actitud emprendedora, los conocimientos para aprender a gestionar recursos como el tiempo y el dinero, el aprender a establecer prioridades y a leer las tendencias sociales y económicas.

 

Emprendimiento

El emprendimiento es una actitud que, como otras habilidades, se puede desarrollar. Consiste en identificar una necesidad y plantear, con liderazgo y determinación, una o varias soluciones. Puede desembocar en la creación de una campaña, de una empresa, de una causa o incluso de una idea sencilla. Desde todo punto de vista, el objeto del desarrollo del emprendimiento es que sea justo y responsable.

Educación financiera

El adecuado manejo del dinero resulta crucial en una sociedad sobre endeudada. La buena relación que tengamos con las diversas formas de moneda implica un conocimiento claro de su flujo y cómo aprovecharlo de una manera ética.

Formación política

El papel de la Escuela Consciente en la formación política es promover el reconocimiento de las diferentes ideologías que hay en el espectro político y con qué argumentos defienden sus posiciones, para enaltecer el uso del diálogo y el debate como la manera de resolver las tensiones sociales.

Actualidad

En este componente hacemos un recorrido tanto por los acontecimientos y noticias que ocurren a diario, como por la opinión y el análisis que de este se derivan. Bien sea actualidad política nacional, internacional, económica, científica, deportiva, social, de la ciudad o de la región e incluso, porque no, del mundo del entretenimiento.

DIMENSIÓN SOCIOAFECTIVA
Los humanos somos animales gregarios. Construimos nuestra identidad con base en las relaciones sociales que desarrollamos, en especial con dos figuras trascendentales: la materna y la paterna. Vivimos toda suerte de experiencias que implican una serie de respuestas las cuales, a la postre, van a determinar nuestro camino en la vida. En la era del conocimiento, resulta fundamental aprender a gestionar nuestras emociones, reconocerlas y no reprimirlas para alcanzar un estado de salud mental que nos permita dar un manejo beneficioso a las diferentes circunstancias que atravesamos cada día. Hemos dividido esta dimensión en dos, aunque, en realidad, lo social y lo emocional son caras de una misma moneda. Sin embargo, podemos distinguir que podemos hacer ejercicios de introspección para entendernos mejor a nosotros mismsx, así como también hay momentos de compartir para trabajar en pro de la comunidad.

Desde nuestro nacimiento nos enfrentamos a un sinnúmero de situaciones que nos afectan de diversas maneras. Para enfrentar aquellas que nos impactan de manera negativa vamos fortaleciendo una parte de nosotros que, si bien busca protegernos, puede hacernos mucho daño. Es el ego, el cual desarrollamos a través del apego. Este es como una máscara que nos ponemos para no andar exponiendo nuestros miedos e inseguridades. Sin embargo, nuestro comportamiento se ve profundamente determinado por este personaje que creamos, y que definitivamente no es nuestra propia esencia. Para crecer, para madurar, debemos aprender a ir al encuentro con nuestra sombra, con nuestros temores, con nuestros complejos, por que están allí para enseñarnos, para hacer nuestra metamorfosis.

Autoconocimiento

Amor propio. A través de talleres, lecturas, conversaciones, preguntas y ejercicios de reflexión, creamos un espacio que favorece el conocimiento de nosotros mismxs, de nuestra valía, de la capacidad que tenemos para resolver un problema complejo, de cómo sentimos que nos perciben los demás y en general, de cómo nos sentimos habitando nuestro cuerpo y transitando esta vida.

Conflictos no resueltos

Todas las personas, sin excepción, nos enfrentamos a sucesos dolorosos que marcan el resto de nuestra existencia. Tantas veces, estos sucesos se reprimen, se inhiben, pero las heridas que han dejado están presentes, manifestándose en nuestra conducta de diversas maneras, generalmente de forma inconsciente. Este es un espacio de recogimiento, de sanación, de curación, de comprensión, de darle sentido a lo ocurrido y de continuar el camino con mayor madurez.

Afecto y sexualidad

La sexualidad humana en la educación implica la capacidad de entender quiénes somos y cuál es nuestro lugar en el mundo. Se desarrolla a través de tres dimensiones: la biológica, la psicológica y la sociocultural. En ella se revisan temas tan diversos como el desarrollo corporal, la procreación, el sexo, los métodos anticonceptivos, las enfermedades de transmisión sexual, las formas de discriminación, la violencia de género, las adicciones.

Integración social

Trata de cómo nos relacionamos con las personas que están en nuestro entorno: con nuestra familia, con los amigxs, con las personas que conocemos e incluso con las que no conocemos, además de aquellas que encontramos en el ciberespacio.

Proyección social

Para despertar la empatía y la solidaridad, proponemos que nuestros niños y niñas se vinculen a fundaciones en donde puedan aportar, sean animalistas, ambientalistas, de apoyo a grupos sociales vulnerables, o cualquier otra índole. Sabemos que tantas veces vamos con la intención de ayudar y, en realidad, el aprendizaje es para nosotros. También es evidente que este escenario nos permite ampliar la realidad que conocemos, al interactuar con personas de otras condiciones sociales y con problemáticas tantas veces más complejas que las nuestras.

Acción social

Al terminar la vida escolar, cada alumnx de fase 4, solx o en grupo, debe realizar una investigación que implique la transformación de una realidad que por una u otra razón resulte desventajosa. La investigación debe tener como propósito no solo la documentación de una problemática, sino promover el cambio para aportar soluciones reales y concretas a los desafíos de nuestros tiempos.

DIMENSIÓN ESPIRITUAL

Dos elementos engrandecen nuestro espíritu: la bondad y la armonía. La bondad en cuanto a hacer el bien, procurar una buena vida y disfrutar este camino que es nuestra existencia. Y la armonía en relación a ir al encuentro de nuestra causa, de nuestra razón de ser. Sin embargo, permanentemente nos encontramos con cientos de obstáculos que nos alejan de estos dos propósitos, por eso no es tan fácil encontrar la calma, la tranquilidad para volver a lo esencial. Dos elementos que nos ayudan a encontrarlas son las actividades artísticas y las prácticas espirituales.

Apreciación artística

Bien sea la pintura, la música, la danza, el teatro, la escultura, la literatura, la arquitectura, el cine, las artes visuales, las artesanías, la fotografía, la jardinería, la culinaria, la carpintería o cualquier otra manifestación artística, tener el gusto de apreciarles nos sensibiliza creando un momento sublime que nos sobrecoge.

Producción artística

Pintar, tocar algún instrumento, pertenecer a una banda musical, cantar, bailar, actuar, esculpir, escribir, diseñar, dirigir un corto, editar, fotografiar, retratar, cultivar, cocinar, dibujar, o cualquier otra manifestación artística, dedicar un espacio para crear arte es permitir que nuestra esencia se asome al mundo.

Prácticas espirituales

Cada persona puede establecer una manera particular de crear una relación con una deidad o una entidad superior o con una fuerza energética. Ya sea la comunión, la oración, la meditación, la respiración, el silencio, cualquiera que sea el camino elegido permite que el alma se enaltezca.

Contemplación

La contemplación de la naturaleza y la admiración que ella nos despierta es otra manera de fortalecer nuestra alma.

Consciencia y trascendencia

A través de lecturas, de preguntas que incorporan sabiduría, de diálogos y de reflexiones, procuramos ir al encuentro con nuestro destino.